La noche mágica

Hace muchos, muchos años, escribí  mi primera carta, no era una carta de amor ni de cortesía, la letra no era ejemplo de pulcritud ni perfección, pero hice todo lo que pude y en ella plasmé toda mi ilusión.  No la llevé a correos, ni la eché al buzón, se la dí a su destinatario en mano, con los ojos llenos de asombro y admiración. Y desde entonces acudí a esa cita todos los 5 de enero durante mucho tiempo, con la caligrafía de la carta mejorando año tras año y con la misma ilusión.

- Peter, vamos a escribir la carta a Santa Claus, la tenemos que llevar esta tarde sin falta

- Zi, zi Lucy mamoz, mamoz a ved a Zanta   

- Querido Santa Claus, este año me he portado muy bien, y querría que me trajeras una muñeca con el pelo rizado
- Yo pambién quiedo ezcribid
-  Tú no sabes escribir Peter, yo pido lo que tú quieras y luego pones tu firma
- Quieeedo un caballo gande, gande y una pelota pada jugad

  

- Ahora tú firmas Peter, ven aquí aupa, también pediremos regalos para papá, mamá y el abuelito.

- Zi, zi, cozas bonitaz

- Peter, ya hemos acabado la carta, ahora hay que llevarla a Santa
- Zi, zi a Zanta, a Zanta!!

- Peter nos tenemos que portar muy bien, si no, nos dejará carbón.
- Yo no quiedo cabón, yo  quiedo pocholate.

- Niños, vámonos a ver a Santa Claus ¿estais listos? ¿teneis la carta preparada?
- Zii, zii eztá paperada
- Sí vámonos ya!!

-  Hace mucho frio, el gorrito también Peter, sin protestar.
- Vale, no potezto  que zi no Zanta no me dejada el degalo
- Bueno, así me gusta
- Hasta luego abuelito!
- Hasta luego, que lo paseis bien

- Vamos deprisa que si no se irá!!
- Code,. code que ze va Zanta!!
- Tranquilos, él no se irá hasta que haya recogido las cartas de todos los niños

Y Santa Claus les esperaba rodeado de magia y color. Los niños aguardaron en fila impacientes su turno y cuando estuvieron frente a él, sus ojos se abrieron de par en par y sintieron una emoción que nunca olvidarán.

- Abu, abu ya eztamoz aquí, hemoz vizto a Zanta, ez muy gande y goddito, lleva un taje gojo y ez muy zimpático,me ha dado un cadamelo

- Siiii, le hemos dado ya la carta y nos ha dicho que él nos ha visto por un agujerito lo bien que nos hemos

 portado este año, estooooy muuuy contenta!!

- Vaya, si que os habeis emocionado.

- Abu, pedo Zanta tene mucho tabajo ¿vedda?

- Sí, pero gracias a su magia puede ir a todos los hogares.

- ¿es mago?

- No exactamente, lo que ocurre es que la ilusión de todos los niños unida le da muuucha fuerza.

- Recuerdo cuando llevé por primera vez la carta....

- Voy a ponerle estas galletas, pobrecito tiene que hacer mucho esfuerzo con el saco lleno de regalos

- Buena idea Lucy!

- Pedo no tenen pocholate.

- Mejor así, Peter, ¿no has visto que Santa tenía una barrigota un poco gorda?

- Ja,ja,ja

 - Vamos niños, a dormir,  dar las buenas noches, que Santa está de camino
- Buenas noches
- Buenaz nochez.

- Vamos Peter, ¿qué te pasa?

- Ez que yo he inzultado a Dam, dije que tenia cada de mostu de tes cabezas

- Tranquilo, Peter seguro que no lo tendrá en cuenta

- Mami eztoy nedviosio, no teno zueño

- Oh! mi chiquitín duérmete tranquilo

- Duérmete tú también cariño

- Mamá, ¿por dónde debe de ir ahora Santa?

- Pues debe de estar cerquita, por eso duérmete

- Buenas noches angelitos

Y a los niños les costaba conciliar el sueño, acordándose de la imagen de   Santa Claus    en   su gran sillón rodeado de luz y color. Cerraban sus ojitos y lo imaginaban con un gran saco lleno de regalos acercándose al umbral de su casa....

... imaginaban que en el momento que ellos se consiguieran dormir, él entraría en su habitación para

 comprobarlo, y les observaría desde la puerta....

...y bajaría al comedor y empezaría a dejar sus regalos bajo el árbol, y a continuación se iría a casa de otros niños para hacerles felices, y así entre imaginación y sueño, salieron los primeros rayos del sol....

- Papá, mamá despertar, despertar, ha venido Santa!!!!

- Adiba, adiba, Zanta, Zanta ha menido!!

- Vamos, vamos....

- Ohhhhhhh! qué caballo tan monito!!! me guzzzta muuuucho!!
- Mira mi muñeca, con el pelo que yo quería. Qué bonitaaaaaaa!!

- Qué caballo tan chuli, ade, ade,ade caballo!!

- Me encanta mi muñeca... y vosotros que teneis en vuestros regalos?

- Ohh! qué chal tan bonito, es muy extremado!!

- Mira Susan, que camisa tan elegante!!

- Abuelito tú también tienes un regalo, siéntate y abreló, abreló!!

- Ohhhh! también Santa Claus ha pensado en mí.

- Es una bufanda preciosa.

- Zi, zi, abu pada que no tengaz fio.

- Nunca tuve una bufanda así de bonita, pero mi principal regalo de Navidad habeis sido vosotros.

Y todos estaban contentos con sus regalos y celebraron el día con emoción.  Y la Navidad de Bristol iba tocando a su fin, ese espíritu que habitó su hogar les dirá adiós, y les dirá que aunque se apaguen las luces, se guarden los adornos y se vaya Santa Claus, qué siga reinando la paz en su hogar.